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Los suplementos alimenticios, ricos en nutrientes, ayudan a suplir las carencias de la dieta. Se pueden recomendar en muchas situaciones, especialmente en casos de fatiga y estrés. Descubra en nuestro sitio web una amplia gama de suplementos alimenticios contra el estrés y la fatiga.
El estrés y la fatiga tienen consecuencias para nuestra salud. Afectan considerablemente al sistema nervioso. Pueden provocar, entre otros, trastornos del sueño, dificultades para concentrarse o prestar atención, así como estados depresivos. Estas dificultades también aumentan el riesgo de agotamiento. Asociados a desequilibrios o carencias alimentarias, se intensifican y causan verdaderas molestias al paciente.
Los suplementos alimenticios contra el estrés y la fatiga suelen consistir en vitaminas y minerales. Las vitaminas y minerales estrella conocidos por combatir el estrés y la fatiga son las vitaminas del grupo B, en particular las vitaminas B2, B3, B5, B9, la vitamina C, la vitamina D, la vitamina E, el hierro y el magnesio.
No obstante, es importante distinguir la naturaleza de la fatiga y, en función de si esta tiene un carácter emocional, físico, psíquico o si está ligada a la falta de sueño, a las diferencias horarias, etc., debe tratarse de forma diferente.
El organismo necesita un aporte suficiente y regular de vitaminas y minerales para combatir la fatiga nerviosa, ligera y crónica.
Fatiga psicomocional
En el caso de la fatiga severa o de los trastornos recurrentes del sueño, es interesante observar los procesos que implican la melatonina, la serotonina o la dopamina.
Serotonina
Se elabora a partir del triptófano, un aminoácido presente en los alimentos. Interviene en la regulación del comportamiento, el estado de ánimo, la ansiedad y el aprendizaje. También se cree que interviene en la motivación, la toma de decisiones y el estrés, y tiende a disminuir la cantidad de serotonina producida en el cerebro.
Así, un descenso de la serotonina podría explicar ciertos trastornos del sueño, la disminución de la motivación y la fatiga persistente.
Las carencias de serotonina, por su impacto en el sistema nervioso, pueden causar trastornos del estado de ánimo, depresión (comportamiento negativo, apatía, irritabilidad, agresividad, desmotivación, pérdida de placer, emotividad, impulsividad) y trastornos del sueño (insomnio, despertares nocturnos).
Los alimentos ricos en serotonina son el arroz integral, los productos lácteos, la proteína de soja, los huevos, el pescado, las legumbres, el chocolate, los plátanos, las almendras y los anacardos, la levadura de cerveza, el pavo, los huevos y la ensalada, entre otros.
Beber suficiente líquido, tener un intestino sano y hacer ejercicio también contribuyen al bienestar físico y mental y a la producción de serotonina. Existen distintas pruebas y evaluaciones para determinar la carencia de serotonina.
Dopamina
Al igual que la serotonina, que se fabrica a partir del triptófano, la dopamina se fabrica a partir de la tirosina. La dopamina interviene en la atención, el placer y la motivación, el sueño, la memoria y la cognición. La dopamina, que también se conoce como la «molécula del placer», interviene en el comportamiento de las personas.
Los signos de carencia de dopamina suelen ser visibles y aúnan, por ejemplo, la lentitud para ponerse en marcha, rigidez muscular, manos temblorosas en reposo y apatía.
La dopamina se encuentra en la leche (y los productos lácteos), la remolacha, las nueces, el perejil, los huevos, el tofu, la carne, las aves, el pescado, el chocolate negro, los cereales, etc.
Esta, que se conoce como la hormona de la felicidad, se libera en el cerebro cuando somos felices y cuando sentimos placer.
GABA
El GABA es un neurotransmisor que constituye un activo antiestrés y relajante. Puede obtenerse a partir de los alimentos, así como mediante plantas como la valeriana, por ejemplo. El GABA se sintetiza a partir del ácido glutámico y
se encuentra en los productos de origen animal (huevos, arenque, queso, pavo, pato, cerdo), así como en la soja, el chocolate, las frutas como el plátano, el aguacate y las semillas oleaginosas (nueces, almendras).
Es mejor tomar el GABA por la noche, ya que favorece el bienestar y la relajación, y ayuda a conciliar el sueño
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MELATONINA
La melatonina, también conocida como la hormona del sueño, se segrega poco después del anochecer. Alcanza su máximo entre las dos y las cuatro de la madrugada y disminuye durante la segunda mitad de la noche.
La melatonina suele ser deficitaria, ya que, con la edad, producimos cada vez menos. La melatonina es la estrella de los viajeros y está indicada para aliviar los cambios de horas. También se conoce como una ayuda natural para el sueño, ya que ayuda a inducirlo
Puede ser simplemente la consecuencia de una actividad física intensa o prolongada: la fatiga, que es natural, es la consecuencia de la acumulación de productos de desecho en las células musculares, del agotamiento de las reservas de combustible o incluso de la deshidratación.
En principio, no hay nada que temer: basta con descansar, comer bien, alimentar los músculos y ¡ya está!
En caso de esfuerzos prolongados, actividad física y acumulación de actividades, se puede recomendar un buen complejo multivitamínico rico en magnesio, calcio, hierro, vitamina C y vitaminas del grupo B.
Ese resulta interesante para que los deportistas se recuperen bien y combatan los ácidos responsables de los dolores y la fatiga en los músculos y los tendones. El Lithothamnium (un alga alcalinizante) y la espirulina (un alga rica en antioxidantes) favorecen una mejor recuperación.
Los antioxidantes se recomiendan para combatir el estrés oxidativo causado por el esfuerzo físico intenso.
El estrés es una respuesta psicológica a una situación problemática y a menudo, va acompañado de la fatiga. El cuerpo, sometido a un esfuerzo constante y sostenido, recurre constantemente a las reservas de energía, lo que provoca una importante falta de sueño y agotamiento.
Aunque no es algo malo en sí mismo, el estrés puede tener graves repercusiones en la salud mental y física cuando no se regula adecuadamente, con consecuencias como el insomnio, trastornos alimentarios, tensión muscular, problemas digestivos, etc. Mantener un estilo de vida saludable no siempre es suficiente para prevenir y combatir el estrés. A veces, es necesario tomar un suplemento alimenticio.
Suplementos alimenticios ricos en magnesio
Además de ser un principio antiestrés natural, el magnesio se conoce por su capacidad para mantener el equilibrio nervioso y muscular. Este mineral multifuncional, presente en todas las células del organismo, interviene en numerosas reacciones enzimáticas y contribuye, en particular, a la relajación muscular, la transmisión de los impulsos nerviosos, la producción de proteínas y la regulación del ritmo cardíaco. También actúa como regulador del tránsito intestinal.
La combinación de magnesio y vitaminas del grupo B es eficaz para combatir el estrés y la fatiga.
El magnesio y las vitaminas B2, B3, B5, B9, B12 contribuyen a unas funciones psicológicas normales, al funcionamiento normal del sistema nervioso, a reducir la fatiga y a mantener un metabolismo energético normal.
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